domingo, 4 de febrero de 2024

Igual que tú

 La vida es un reflejo de mí misma,

cada día me devuelve lo que yo le doy,

es amable y generosa con mi persona

y me trae el dulce sabor de mi misma esencia.


No hay distancia entre mi persona y la tuya,

no hay espacios intermedios,

nuestras energías fluyen a un tiempo

porque estamos dentro de un círculo encantado,

de un apretado beso.


Yo escucho la música de tu corazón 

y participo de tus alegrías y tristezas,

igual que tú atesoro momentos inspirados y tiernos,

y me dejo vencer por cansancios y desánimos

buscando el sentido a esto que estoy viviendo.


La vida se me regala,

pero no logro entenderla,

extiendo mis manos al mundo

quiero encontrarme y encontrarte,

abro mi ser al misterio,

y a la vez miro a otra parte.


Para mantener encendida la llama sagrada

que me lleva al encuentro de lo invisible

necesito ser pequeña e inocente 

con locura en mi piel

y mirada de aguas trasparentes.


Respiro aire y espíritu

todo en el mismo momento,

en mi cuerpo de barro,

en el centro de mi nada

distingo luces y perlas

que me alumbran los caminos

y le traen a mi inquieto corazón 

el regalo del amor y la belleza.


2 comentarios:

A.M.P dijo...

La vida es amable, generosa, bella... Un regalo y un placer leerte, Conchi. Besos

Mónica Inés Pretel dijo...

No hay distancia entre mi persona y la tuya
Respiro, en mi cuerpo de barro
En el centro de mi nada
Y distingo, encuentro.
Conchi, que belleza