sábado, 6 de enero de 2024

A veces me quedo mirando

 A veces me quedo mirando el horizonte

acunando la vida en mi mirada,

recibiendo el abrazo de ese instante

que abarca todos los mundos

y tiene maravillas tan bien guardadas.


Mis ojos ven muy borroso

pero mi tierno corazón 

recibe todas las flechas,

lo noto por la alegría que tengo

porque la paz no me cabe dentro del pecho

y me lanzo a comunicarlo a toda la tierra.


Acudo a citas sin programarlas,

recibo dardos enamorados,

algo me viene a empujar

para que complete el mundo creado

con la ayuda de palabras recién nacidas,

inocentes, originales y frescas.


Los ríos que me atraviesan

me enseñan a desandar

para poder liberarme,

me indican senderos nuevos

me ensanchan el corazón

intentan que yo disfrute

y consiguen despertarme.


Ni un segundo sin luz,

ni un momento sin calma,

porque solo tengo este instante para vivir,

después no existe,

mañana y ayer son hoy.


Adornaré este presente infinito,

lo meceré entre mis brazos,

y le cantaré bellos cantos

igual que si fuera un precioso niño.


3 comentarios:

Mónica Inés Pretel dijo...

Acunando la vida en mi mirada
Ni un segundo sin luz
Ni un momento sin calma.
Precioso Conchi

Anónimo dijo...

... después no existe.
Muchísimas gracias 😘 Conchi qué bien expresas lo que tenemos dentro!

Anónimo dijo...

Precioso ,Conchin.