Soy un dios pequeñito
en un ser humano,
con aire por fuera,
y por dentro con luz y con pena.
Soy un dios quejumbroso
que no acepta el destino,
solo quiere soñar y no tiene reposo,
y rechaza sentirse dormido.
Soy un dios zalamero
que persigue caricias
y abrazos con magia,
y transforma su amor en sonrisas.
Soy un dios solitario y rebelde
empeñado en hacer lo que quiere,
que vive escondido y alerta
y nadie le vence y nadie le hiere.
Soy un dios desterrado a este mundo
y sediento de no sabe qué,
que investiga y rastrea y pregunta
y pierde en las noches su rumbo.
Soy un dios temeroso y valiente a la vez,
con mucho de torpe y de sabio muy poco,
con mezcla de esencias humanas y luces y agua,
con pizca de cuerdo y mucho de loco.
Soy un dios boquiabierto y pasmado,
y busco otros dioses pequeños
y torpes y locos y humanos,
y tocar corazones que están a mi lado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario