Estoy estudiando los signos,
descubriendo el infinito en lo que nace,
el sentido en cada día y cada hora,
el espíritu en la carne,
iniciando nuevas sendas y miradas.
Aunque me rodee un mundo de tristezas,
que amenacen mi palabra,
para abrazar mi destino
he decidido vivir consciente y despierta
Todo se alía para ayudarme,
nunca estoy sola en el universo,
en este océano de vida perfecto
soy una inquieta gota de agua.
En la vida cotidiana
están todos mis tesoros,
escondidos
o a la vista y a las claras.
Cuando no cabe en mi cuerpo
tanta emoción y armonía
hago partes con mi tiempo
para saborear cada instante,
cada perla y cada gesto.
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