Cuando el corazón me duele
tú te haces esencia de amor y de aire
y me impregna tu luz
y tu aroma me invade.
Cuando todas las cosas se me mueren
tú me rodeas con tus palabras sin voz,
con tu fuerza infinita
y tu sabiduría recién estrenada,
y resisto firmemente contigo y a tu
lado,
ni un instante me has dejado,ni he sentido soledad,
desamor, desesperación,
rabia o desgana.
Solo fuerza siento
y ternura y diálogo,porque charlo, río,
y me dejo acompañar
por mi marido,
que es un muerto que está vivo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario